Hay un edificio triangular, a 415 kilómetros de donde escribo, que echo de menos. La luz entra por una gran clarabolla e ilumina un comedor vacío, que espera a oír de nuevo voces conocidas, el tintineo de platos y cuchillos, los cuchicheos entre el ruido, las risas por encima de él. Hay sólo un sitio en este mundo que puede solucionar el mundo, la pecera. Quizás por eso arda Canarias, o los amigos como Pepe se tengan que marchar lejos, o los malos sigan matando, o en África haya hambre, porque personajes como Eloy, como yo y como todos los que aquí escriben (vamos, muy muy pocos),nos hemos tomado unas vacaciones demasiado largas... Espero veros pronto y solucionar el caos del mundo, aunque sea a costa de crear un gran caos en una residencia que ahora está dormida. Esto es todo lo que da de sí mi tiempo en este ciber de Torrelavega...
HASTA PRONTO
1 comentario:
La solución pasa por imaginar la diferencia entre los cómodos sillones de mi casa y los cómodos sillones de la pecera. Pero por suerte, más que por desgracia, desde luego eso no es lo más importante que hay en la pecera así que espero el regreso. Algunos por suerte o por desgracia (en este punto ya es más difícil saber donde está el límite entre un punto y otro xD) nos veremos un poco antes por ese edificio rectangular, y bastante menos soleado de lo que da a entender la fotografía oficial. Ya en octubre estaremos todos de nuevo.
Señores, un abrazo, salud y suerte.
Publicar un comentario